Como los párpados (ver el ojo), su cometido es exponer, es decir:
- Permitir el paso de la luz al sensor
- Durante el tiempo que se desee
Tiempo versus velocidad
La variable controlada por el obturador de la cámara se conoce por varios nombres: tiempo,tiempo de exposición, tiempo de obturación o velocidad de exposición o de obturación o, simplemente, velocidad. El tiempo y la velocidad son magnitudes inversas, es decir, a mayor velocidad, menor tiempo de exposición y viceversa.
El tiempo de exposición se mide en segundos y sus fracciones, una escala típica es:
1" 1/2 1/4 1/8 1/15 1/30 1/60 1/125 1/250 1/500 1/1000
(desde un segundo hasta una milésima de segundo)
Eliminando por comodidad los numeradores de las fracciones, la escala se simplifica así:
1" 2 4 8 15 30 60 125 250 500 1000
Esta escala es ampliable de forma simétrica por delante y por detrás:
60" 30" 15" 8" 4" 2" 1" 2 4 8 15 30 60 125 250 500 1000 2000 4000 8000 15000
Cada modelo de cámara dispone de más o menos velocidades según lo antiguo y/o lo complejo que sea.
Igual que ocurre con el diafragma, la escala de velocidades está pensada para aportar el doble o la mitad de luz. También se puede controlar el tiempo de exposición a tercios, de manera que la escala se amplía con dos valores más entre cada uno de los anteriores.
Cómo son
Mecánicamente los obturadores pueden ser básicamente de dos tipos
- Central: en la mayoría de las cámaras compactas y en algunas réflex. Funciona como un diafragma que permite el paso de la luz cuando se abre completamente.
- De plano focal o de cortinilla: mayoritariamente en las réflex. Dos cortinillas retráctiles se alternan para exponer:
- El espejo se levanta descubriendo las cortinillas del obturador
- La cortinilla inferior, desplegada, desciende
- La cortinilla superior, plegada, la sigue desplegándose y permitiendo la exposición
- El espejo vuelve a la posición de reposo
Este vídeo muestra el obturador de una cámata réflex en acción.
Tomas a pulso o con soporte
Si el tiempo de exposición es demasiado largo, se corre el riesgo de obtener imágenes movidas o trepidadas por nuestra culpa, es decir, el movimiento lo produce el fotógrafo. Uno de los principales culpables es el pulso: "el latido intermitente de las arterias, que se percibe en varias partes del cuerpo y especialmente en la muñeca" es normalmente imperceptible, sin embargo, puede mover la cámara si la toma es lo suficientemente larga haciendo que la imagen obtenida no tenga la nitidez suficiente.
Es importante saber a partir de qué tiempo de exposición es necesario emplear un soporte que inmovilice la cámara: una silla, el alféizar de una ventana, un poste, ... un trípode. Hay otra variable a tener en cuenta: para recodarla piensa en unos prismáticos; cuanto más potentes son, piensa en un telescopio, más díficil es mantenerlos inmóviles ante un sujeto lejano. Conocer la distancia focal del objetivo es de suma importancia para saber cuál es la velocidad límite por debajo de la cual corremos el riesgo de obener imagenes trepidadas. Hay una regla que dice que esta velocidad debe ser al menos igual a la distancia focal del objetivo. Recuerda las distancias focales dependen del tamaño del sensor.
Por ejemplo, si hemos montado un objetivo de 50 mm, la velocidad de obturación ha de ser de un 1/60 segundos o más para poder trabajar a pulso.
Son muchas las ocasiones en que hemos de trabajar con velocidades de obturación más lentas de lo que desearíamos, bien porque las condiciones de luz lo impongan o bien porque el efecto buscado lo exija, entonces necesitaremos un soporte o, mejor, un trípode, que tiene que ser fuerte y rígido. Resulta interesante acostumbrarse a emplear el trípode incluso cuando parezca no ser necesario y siempre que sea posible; en muchos casos se evitarán desagradables sorpresas posteriores. Recuerda que no debes fiarte de la pantalla de la cámara, en pequeño todo parece correcto hasta que lo ves en el monitor del ordenador movido o desenfocado.
Ante la duda, cuando no tengamos un trípode a mano y la foto requiera una velocidad baja, es mejor hacer la foto por si acaso. Busca cualquier soporte: una barandilla, encima de la bolsa de la cámara, ... dispara con el temporizador o mejor, con un disparador de cable.
Efectos
El obturador permite detener el tiempo y ver una gota de agua suspendida en el aire o sumar toda la espuma que genera un torrente para pintar líneas sedosas que simulan azúcar. La luz se acumula en el sensor mientra el obturador permanece abierto y plasma el movimiento de los sujetos.
El obturador nos permite ver la suma de los movimientos de los objetos, una misma imagen puede contener todas las posiciones que ocupó al moverse mientras el obturador estaba abierto...
Movimiento
Si durante el tiempo de exposición el sujeto se ha movido, su imagen se verá borrosa, dejando una traza según el recorrido en el movimiento.
Con velocidades suficientemente lentas, obtendremos una sensación de movimiento al fotografiar sujetos que se mueven. También se emplean para plasmar en una sola imagen lo que ha sucedido en un intervalo de tiempo, por ejemplo, los fuegos artificiales.
Congelación
Podemos recurrir a una velocidad suficientemente alta para conseguir que la traza no sea apreciable, es decir, no le demos tiempo a serlo, y el sujeto en movimiento aparente estará quieto.
Recurriremos a la congelación cuando deseemos apreciar en la imagen lo que el ojo humano no es capaz de ver: un instante en el derrumbe de un edificio o la caída de una gota en un charco.
Es casi imposible acertar a la primera con la velocidad de obturación o con el momento oportuno de apretar el disparador por lo que recomendamos tirar unas cuantas fotos para seleccionar la que más se acerque a lo que queríamos, en ocasiones obtendremos efectos que no nos habíamos propuesto.
Barrido
Una variante de la técnica del movimiento consiste en hacer que el sujeto en movimiento parezca congelado y sea el fondo el que parezca barrido. Para ello, moveremos la cámara siguiendo al sujeto en movimiento y dispararemos cuando pase por el lugar que habremos preenfocado, así el sujeto aparecerá congelado respecto a nosotros porque nos movemos con él y el fondo barrido.
Posición "B"
Esta posición especial del obturador permite abrirlo tanto tiempo como se mantenga pulsado el botón de disparo.
Se utilizará siempre que la exposición requerida exceda a la más lenta que tenga la cámara (normalmente 30 segundos) y siempre que se deseen efectos como exposiciones múltiples, fuegos artificiales, ...